Los Diez Mandamientos de la Ley de Dios:
1. Amarás a Dios sobre todas las cosas.
2. No tomarás el nombre de Dios en vano.
3. Santificarás las fiestas.
4. Honrarás a tu padre y a tu madre.
5. No matarás.
6. No consentirás pensamientos, deseos ni actos impuros.
7. No robarás.
8. No dirás falso testimonio ni mentirás.
9. No desearás al hombre o a la mujer de tu prójimo.
10. No codiciarás los bienes ajenos
Los Mandamientos de la Iglesia:
1. Participar en misa entera los domingos y fiestas de guardar.
2. Confesar los pecados graves al menos una vez al año.
3. Comulgar por lo menos en tiempo de Pascua de Resurrección.
4. Ayunar y abstenerse de comer carne cuando lo manda la Iglesia.
5. Contribuir al sostenimiento de la Iglesia.
Las obras de misericordia:
Obras de Misericordia Corporales:
Dar de comer al hambriento: Atender las necesidades básicas de alimento de quienes carecen de él.
Dar de beber al sediento: Proporcionar agua a quienes tienen sed.
Vestir al desnudo: Ofrecer ropa a quienes no tienen la suficiente para cubrirse.
Dar posada al peregrino: Ofrecer refugio y hospitalidad a quienes lo necesitan.
Visitar a los enfermos: Brindar compañía y cuidado a los enfermos.
Visitar a los presos: Acompañar y apoyar a las personas encarceladas.
Enterrar a los muertos: Dar una sepultura digna a los difuntos.
Obras de Misericordia Espirituales:
Enseñar al que no sabe: Compartir conocimientos y ayudar a otros a aprender.
Dar buen consejo al que lo necesita: Ofrecer orientación y sabiduría a quienes buscan ayuda.
Corregir al que se equivoca: Ayudar a otros a reconocer y corregir errores con amor y paciencia.
Consolar al triste: Brindar apoyo y consuelo a quienes están sufriendo.
Perdonar las injurias: Ofrecer perdón a quienes nos han ofendido.
Sufrir con paciencia los defectos del prójimo: Aceptar y tolerar las imperfecciones de los demás.
Rogar a Dios por los vivos y los difuntos: Orar por las necesidades y el bienestar de los demás.